TAN SOLO UN RECUERDO CONGELADO

Pueden haber mil personas a nuestro alrededor, regalándonos sonrisas falsas y matándonos con la mirada mas no importará si sabemos que contamos con amigos que darían la vida por nosotros, como nosotros por ellos. A estos los llamo LOS INDISPENSABLES, creo que todos tenemos algunos en nuestras vidas. Los míos los he mencionado en algún momento en el blog, por si aun no los conocen se los presento: MAPLE, NYKY, LA INOPORTUNA, LUNA, JJ, JG, EL INCIERTO y dos mas que no tienen seudónimo.
Pero que pasa cuando uno de estos te rompe el corazón, porque si, los amigos también pueden hacerlo, a fin de cuentas los amamos. Porque existen mas tipos de amor que el romántico, que nos venden como el único y al que le han compuesto mil canciones. Hay otros que duelen igual cuando fallan y a los que no le dedican canción alguna. Por eso me veo obligada a usar la que escucharan mas abajo, aunque haya sido escrita con una intención diferente a la mía.

En fin la cosas fueron algo así:

V- ¿Por que parece que cuando mis amigos y yo intentamos acercarnos tu te alejas? No me gusta sentir que mi amistad es solo un anexo que funciona por Internet.

I- Es que aquí eres tu y pues con ellos...

V- Yo soy la misma en todos lados, no uso un doble libreto.

I- Es que no me siento cómodo con tu circulo.

V- ¿Por que?

I- No hacen todo lo que deberían o me dirás que sí.

V- Es cierto, pero no son malos y están intentando mejorar.

I- De seguro tienen cosas buenas, pero sabes que debemos escoger bien a nuestros amigos.

V- Entonces es un milagro que seas mi amigo, pues yo no hago todo lo que debería, aunque continuo esforzándome.

I- En realidad si no fuéramos amigos desde niños pues...pues...pues...



Esto sonará mejor si lo leen rápido:

El libro de la selva,
la canchita salada.
el billete de monopolio,
los fósforos, las charadas.

El pollo en salsa de frutas,
el mousse de limón que no nos salía,
los dibujos animados,
tu adolescencia y la mía.

Aquella piedrita verde,
el pie de maracuya que quemé,
el omelette de champiñones
y el CD de Juan Luis Guerra a las seis.

Las conversaciones eternas,
el juego de Mario que nunca gané,
todo lo que nos contamos
y una que otra cosa que callé.

En fin, todos los recuerdos de infancia
que parecen comprometerte,
lánzalos por la ventana
que al final ya nada sienten.

Guárdate el favor de ser mi amigo,
y esa amable sonrisa tuya
que aprendió a jugar conmigo.

No los quiero si soy solo una costumbre,
un recuerdo congelado,
esto es la que soy ahora,
soy la misma aunque he cambiado.

Quiero a mi lado personas
que volverían a escogerme,
si todo empezara de cero
si volvieran a conocerme.


No me hacen falta las excusas,
he aprendido a dar la cara
puedo mirarte a los ojos
y decirte que ya no hay nada.

Que de sobra se que no soy perfecta,
mas no suelo compararme
con lo que han logrado otros,
si no con la que era antes.

Adiós INCIERTO.